
Anabel Pantoja lleva una semana viviendo sola en el pisito que construyeron en las mismas instalaciones de Mediaset y no ha parado de llorar. Las visitas de sus amigos y las citas con el entrenador y el nutricionista no consiguen distraerla por lo que está siempre triste.
A pesar de la corta estancia, a ella los días se le están haciendo eternos y ya “le pesan” porque echa mucho de menos a su gente y a su móvil. Aún así, ha podido hablar con su novio, Omar Sánchez, quién le ha tirado en cara su actitud, consiguiendo dejar a Anabel hundida.
Lo único que Omar le ha dicho a Anabel es que no le gusta que esté llorando todo el día. Ella se ha defendido diciendo que es una persona que llora mucho y que se siente muy sola. Aunque ha querido dejar claro que en el piso está genial y que no le falta de nada.