El subinspector de policía, Alfredo, dice que es un robo anómalo, que quien ha entrado llevaba cierta intención al llevarse cosas muy concreto.
Cuando le preguntan que si puede ser un encargo de alguien que quisiera hacer daño al colaborador dice que no, por que se llevaría cosas de cualquier tipo a la vez que se llevara lo encargado. Que apunta más a que quien ha entrado quería solo cosas personales ya que ha dejado muchas cosas de valor que podría haberse llevado perfectamente.
Alfredo aconseja a Kiko que si se hace a una idea de quién es como ha comentado a lo largo de la tarde, que se acerque a la comisaria a informar por que puede ayudar en la investigación, aprovecha para decirle que lo afronte con normalidad, que piense que no han hecho nada violento en el domicilio y se muestre frío y tranquilo para demostrar que está por encima de todas las cosas.
Kiko aprovecha para preguntar que sucede si pillan a los autores de los hechos y el policía dice que tiene poca pena, el robo con fuerza está poco penado y solamente tendría algo más de gravedad si utilizaran el material que han robado. Alfredo afirma con pena que seguramente ni irían a la cárcel.
Pregunta también si tendría que informar a la policía en caso de que los ladrones se pusieran en contacto con él para devolverle sus pertenencias y en caso de que esto pasara le responden que debería de retirar la denuncia, que es él quien decide si continuar con acciones penales o desistir.
A la vez dice que no sería cómplice ni responsable si aceptara la devolución, ya que son sus cosas. Le aconsejan que en caso de que eso pase, él informe a la policía.
Kiko muestra su preocupación por la divulgación de sus fotos/videos/informaciones a lo que le comentan que en caso de que eso pasara tendría que ampliar la denuncia ya que sería otro delito diferente.