Mila Ximénez ha tenido un confinamiento muy complicado. Hace semanas entro en directo en Sálvame diario y confesó que lo estaba pasando mal por qué tenía mucho miedo.
El mayor temor de Mila era que le pasara algo ya que su hija vive fuera y si le pasase algo no llegaría a tiempo para estar con ella.
Por ese motivo estaba pasando la cuarentena sin pensar con ganas de dormir para que se pasará el tiempo más deprisa.
Esta noche, Mila Ximénez ha vuelto a su trabajo en el que ha contado las claves de su confinamiento.
Lo primero que ha contado ha sido que como ya dejó caer, ha estado tomando pastillas para combatir el miedo.
Además, Mila Ximénez ha confesado sufrir el «Síndrome de la cabaña», que es el miedo a salir a la calle tras el confinamiento.
Eso es lo que explica que haya llegado al trabajo temblando y muy nerviosa.
El síndrome de la Cabaña provoca miedo a salir a la calle después del confinamiento. Este síndrome puede llegar a impedir hacer vida normal si se sufre el miedo extremo a salir a la calle y contraer la enfermedad.