Se veía venir desde el primer momento. O Duraban una semana, o duraban toda la vida, pero un término medio no iba a haber. Así que tratándose de Violeta que le duran las relaciones menos que un helado en verano al sol, han durado poco más de una semana.
Violeta es una chica dulce, amable, cariñosa… No, Violeta es una basta, chillona, mal criada, macarra, tiene que tener siempre la razón, y con una persona así nada puede salir bien.
Ya empezó a torcerse la cosa cuando Fabio dijo en la gala que había salido de una relación muy difícil, Violeta que se veía venir que Fabio no le iba a dar lo que ella quería empezó a dramatizar diciendo que había dejado a su novio, como si le hubiera dolido algo a ella.
Decía que había sido “Muy heavy”, que si lo dice Julen que le gritó, ridiculizó y puso a parir delante de toda España, lo creemos. Pero de ella no es posible creerse nada, porque lo único que hizo fue dejar al chaval en directo, y encima echarle la bronca.
Violeta rompe una botella de cristal y si tienes la mala suerte de pasar por ahí te echa la culpa y te desmonta en un momento. Y esto es totalmente cierto porque anoche pudimos ver como ella, deja su ropa en el tanque del agua, se le moja y echa la culpa a Mahi.
Por que Violeta no puede colgar su ropa de un palo como todo el mundo no, Violeta es más chula que un ocho y deja su ropa donde se le puede mojar, y encima la culpa es del resto. Esto es así, la gente como Violeta tiene menos empatía que una piedra, se creen que el mundo vive por y para ellos y no se dan cuenta de que en realidad no son nadie.
Así que la bronca de Fabio y Violeta empezó por eso, porque como Violeta había sido desterrada, pedía que los de la otra isla le pasaran sus cosas, y como sus compañeros tardaron un poco, pues la chica montó en cólera y organizo el número 33.
Empezó a despotricar contra Fabio, Omar y Mahi, diciendo: ¡Esto es súper feo y de ser mala gente!” que no tienen bastante con quedarse tres en un grupo y jugar con desventaja porque a menos personas, más trabajo para cada una, que encima tiene que cargar con los berrinches de Violeta todo el tiempo.
Al final Fabio perdió los papeles y dijo: “Es imposible tratar con Violeta. Está haciendo un papelón increíble. Hoy es una niña de 15 años, es una caprichosa”.
Después de esto, Violeta, que no termina de pillar la idea de que la han cambiado de grupo, se fue a exigir su parte de coco y su ración de comida y es que si Violeta pierde los papeles, no se calma, va a más. Mientras tanto Fabio cada vez aguantaba menos y decía “Lo grita como si nosotros le estuviéramos robando las cosas, pero qué le pasa” “¿No te fías de nosotros? No sé que le pasa. Está loca esta chavala”.
Y Claro llamar Loca a Violeta es cómo jugarse la vida, y con lo que le gusta a ella una buena bronca y un drama, empezó a gritar “No me llames loca. Yo no te he faltado al respeto. Te has pasado tres pueblos”
Mientras tanto Omar y Mahi no se metían en la bronca y aconsejaban a Fabio parar la bronca y no seguir discutiendo, por otra parte Colate, no paraba de echar leña al fuego diciendo a Violeta que tenía que ir a exigir su coco.
Y allá que fue, le dieron un coco diciéndole que le correspondía sólo medio, pero como Violeta estaba endemoniada, se lo quedó todo, bien de compañerismo.
